El mármol tiene una textura única y patrones naturales que varían de una losa a otra, lo que lo convierte en un material muy apreciado para interiores de lujo.Su coloración varía, pero los más comunes son los tonos de blanco, gris, beige, crema, negro, verde, y rosa. Además, puede presentar vetas (líneas de otro color) que le dan un carácter distintivo y sofisticado.Los acabados de mármol pueden ser pulidos (brillantes y lisos) o mate (acabado rugoso y más natural), dependiendo del estilo que se quiera conseguir.